Como expliqué en artículos anteriores, lamentablemente la producción extensiva de animales para el consumo de carne y las prácticas abusivas de la pesca hacen que el consumo de animales sea una costumbre completamente anti ecológica. No debería ser así, el ser humano debería poder consumir algo de proteína animal, pero en este momento histórico, esto es un hábito que necesitamos dejar atrás para que la biodiversidad y el planeta se restaure.
Pero el consumo de vegetales tampoco es completamente inocuo para el planeta. Todo depende del origen del producto, el transporte que ha sufrido, el uso de productos químicos usados para su cultivo y el formato de entrega.
En productos que llevan mucho embalaje, probablemente se haya usado más energía en el material de empaque que en la propia producción del producto.
Apuesta por el consumo eco responsable de alimentos
Las etiquetas de alimentos orgánicos, de pesca sostenible o de producto eco no siempre son una garantía. Lo mejor es informarte directamente con el vendedor y comprar producto de temporada.
Idealmente, deberíamos comprar directamente al productor, acudiendo a los mercados semanales de tu zona. Para los productos lejanos, deberíamos priorizar el comercio justo para que por lo menos esos agricultores obtengan un beneficio apropiado por su trabajo.
El Comercio Justo, los productos orgánicos y la reducción de la huella de carbono de los alimentos son 3 razones importantes para comprar tu comida de manera ética.
Es vital apoyar a los agricultores, tiendas y proveedores locales, de esta manera contribuirás al comercio de tu zona y reducirás el impacto ecológico de comprar productos lejanos.
Si no puedes acudir a un mercado, prueba de asociarte a una cooperativa de consumo. Podrás recoger tu compra el día que mejor te vaya, contribuirás a una economía más amigable y asegurarás que el origen de tus productos de consumo sean de proximidad y comprados directamente al productor.
Apuesta por el consumo de alimentos de temporada
Alimentos de invierno
Remolacha, col zanahoria, apio, nabo, endivia, escarola, verduras de hoja, puerro, cebolla, chirivía, patata, calabaza, repollo, pera, naranja, mandarina, alcachofas, kiwi, limón, pomelo, apio, berenjena, brócoli, calabacín, coliflor, escarola, espinaca, guisante, haba, judía verde, pimiento, repollo.
Alimentos de primavera
Col, coliflor, endivia, verdura de hoja, puerro, lechuga, brécol, rábano, fresas, espárragos verdes, níspero, nabo, pepino, pimiento, tomate, calabacín.
Alimentos de verano
Aguacate, albaricoque, breva, cereza, ciruela, frambuesa, higo, melocotón, melón, nectarina, paraguayo, pera, sandía, calabaza, cebolla, lechuga, nabo, pepino, remolacha, rábano, zanahoria.
Alimentos de otoño
Caqui, chirimoya, granada, kiwi, limón, mango, manzana, naranja, pera, uva, acelga, ajo, alcachofa, apio, berenjena, brócoli, calabacín, calabaza, col, coliflor, endivia, escarola, espinaca, guisante, judía verde, lechuga, nabo, pimiento, puerro, remolacha, repollo, rábano, tomate, zanahoria.
Alternativas a la compra de alimentos
El autocultivo de alimentos para consumo
La mayoría de nosotras contamos con un balcón o terraza o por lo menos un alféizar soleado en el cual ubicar algún tiesto. Es una buena oportunidad para cultivar tu propio mini jardín de vegetales de hoja y plantas aromáticas y así, disponer de una fuente constante de hojas frescas para condimentar tus platos favoritos.
Cebollino, albahaca, tomillo, perejil, menta, romero, orégano, salvia y cilantro son especies fáciles de cultivar en interior. Para mantenerlas durante todo el año, basta con regarlas regularmente y abonar la tierra en su debido momento.
Recolecta de vegetales silvestres para consumo
Aunque no dispongas de espacio para cultivar poco más que un par de hierbas aromáticas, no significa que no puedas disfrutar de platos de verduras de manera gratuita.
Se pueden encontrar vegetales comestibles durante casi todo el año. Solo tienes que asegurarte de no dejar una zona desnuda y de no arrancar las plantas de raíz.
Muchas plantas silvestres son comestibles, pero tienen un sabor más amargo al que estamos desacostumbradas. Así que comienza probando cantidades pequeñas. Por ejemplo, las hojas del diente de león son perfectamente comestibles, pero su sabor y aspereza es algo a lo que te tendrás que acostumbrar poco a poco.
Las 10 mejores plantas silvestres comestibles
- Alsine Stellaria media
Se trata de una planta tierna con un sabor similar a la del canónigo. Se puede recoger durante todo el año, excepto tras heladas.
- Ortiga Urtica dioica
Es rica en vitaminas A y C. conviene recoger (con cuidado) las hojas jóvenes y cocerlas como las espinacas para incluirlas en sopas.
- Hierba de ajo Alliaria petiolata
Arranca unas cuantas hojas jóvenes de cada planta, pícalas bien y añádelas a las ensaladas para obtener un leve sabor a ajo.
- Tomillo silvestre Thymus drucei
Se recoge cuando está en flor y se emplea cruda para elaborar una infusión o en sopas y guisos. Es más suave que las variedades cultivadas.
- Berro amargo Cardamine hirsuta
Las hojas de esta planta poseen un sabor dulce y picante. Se puede emplear en ensaladas y bocadillos.
- Berro de agua Rorippa nasturtium-aquaticum
Sabe igual que los berros comerciales. Para conseguir un sabor más intenso, recoge las hojas más viejas y oscuras. Asegúrate de que la planta crece en una corriente limpia.
- Acedera Rumex acetosa
Las hojas de sabor intenso se pueden añadir a ensaladas y guisos.
- Lúpulo Humulus lupulus
Recoge los brotes y las hojas jóvenes a finales de primavera y principios de verano. Se pueden añadir a sopas y tortillas o se ponen a remojo en agua con sal y después se hierven hasta que queden tiernas.
- Cenizo Chenopodium álbum
Esta planta coloniza rápidamente los descampados. Se recomienda cocer las hojas como si fuesen espinacas.
- Hinojo Foeniculum Vulgare
Corta las hojas a principios de verano y añádelas a los platos de pescado y a las ensaladas de patata.